El Dolor del Momento


7:30 AM. El Atasco de la Mañana

• Me doy cuenta de que no es fácil activar las virtudes cuando las emociones negativas se han metido en mi sistema y están alteradas. Me tomo un tiempo para permitirme que estas emociones negativas disminuyan antes de que me pueda centrar en producir sentimientos de humildad y comprensión.

Hablando francamente, es fácil enviar a alguien compasión o perdón cuando nos encontramos en un estado de ánimo seguro y cómodo. Cuando nuestras emociones son tranquilas y están en un estado de bienestar, no es demasiado difícil practicar el cuándo-cuál-cómo. De hecho, este es el punto central de la auto-maestría emocional —crear un campo energético humano individual (CEHI) que esté firmemente arraigado en la energética del alma— la sólida plataforma del corazón energético. Estos firmes cimientos nos llevan al control emocional, a la fuerza y a la serenidad en medio del caos, dándonos la oportunidad de servir a otros (y a nosotros mismos) en dificultades.

¿Has tenido la oportunidad de practicar el cuándo-cuál-cómo, en medio de tu propia confusión emocional? Trata de recordar tu estado de ánimo y tus emociones en el instante de una aguda disputa o al golpearte el dedo del pie. ¿Qué emoción estabas sintiendo? ¿Amor y paz, o ira y dolor? Si alguien te hubiera preguntado en el momento en que te aplastaste el dedo del pie, cuánto suman 96 + 47, ¿cuál habría sido tu respuesta? Probablemente entiendas mi punto de vista.

Cuando estamos en medio de una situación emocional personal, es muy probable que no seamos capaces de iniciar la práctica cuándo-cuál-cómo de una manera oportuna. En tales situaciones, estamos probablemente con mucho dolor, y como nuestros ejemplos anteriores mostraron, cuando estamos con cualquier tipo de dolor es difícil, si no imposible, pensar y sentir con claridad.

Aquí tienes un ejemplo personal que probablemente aparecerá insignificante para la mayoría de la gente, pero la maravillosa practicidad del cuándo-cuál-cómo es que aún podemos usarlo para los incidentes aparentemente más triviales de nuestra vida. Recordemos, sin embargo, que esta práctica no es acerca de los eventos o contenidos mismos, sino sobre cómo reaccionamos a ellos. Con esto en mente, aquí está mi ejemplo. Cuando comencé a practicar el cuándo-cuál-cómo, estaba viendo un partido de béisbol. Mi jugador favorito fue al bate y fue bateado en la mano por el lanzador del equipo contrario. Resultó que la mano bateada estaba fracturada. Él era el mejor bateador en el equipo y fue deshabilitado durante un mes por un hueso roto de su mano.

Estaba enojado y frustrado, sin embargo, de inmediato recordé el cuándo-cuál-cómo. Me dije a mí mismo: "Este es el momento de entrar en la práctica." ¿Sabes que estaba tan molesto e irritado que no podía ni iniciar el proceso? De hecho, lo creas o no, estaba pasando un mal momento ¡intentando recordar los nombres de las seis virtudes! Estaba doblemente sorprendido. No sólo no podía pensar con claridad, sino que tampoco podía sentir. Estaba atrapado en un torbellino emocional de dolor y frustración y no tenía esperanzas de involucrar a las virtudes del corazón.

En el plano intelectual, sabía que el lanzador no había lesionado al bateador a propósito, pero sin embargo no podía expresar a la situación comprensión, compasión o perdón. Esto, creo, es un ejemplo de cómo el dolor del momento afecta a nuestra capacidad de practicar el cuándo-cuál-cómo.

Aquí en nuestro ejemplo, nuestro practicante sintió su falta de agradecimiento por su familia, pero pronto se ha sentido desbordado entre su irritación por el periódico mojado y la cuestión más amplia de la discusión de sus hijos. Es demasiada confusión y dolor emocional para acoplarse a la práctica. La capacidad de superar este impedimento viene con la experiencia en la práctica. En las etapas iniciales, si estás abrumado con una situación, no te culpes por tu incapacidad para expresar las virtudes. Sé paciente y espera a que tus emociones se calmen, y más tarde, cuando tengas algo de tiempo, haz el trabajo de enviar las virtudes que sientas más adecuadas. Recuerda que el corazón energético y el Ser Superior no operan en el espacio-tiempo, ni de manera local. Esto significa que, si no puedes realizar la práctica cuando se está produciendo la situación, puedes realizar tu servicio más tarde (en el tiempo).